Existen webs que introducen malware y cambios de configuración en nuestros navegadores al pasar por ellas. En ocasiones sin darnos cuenta, estos websites, que contienen código fuente malicioso, realizan modificaciones en la configuración de los navegadores web.
En caso de que se produzcan es posible que no nos demos cuenta, pero la seguridad de nuestros datos personales y bancarios queden comprometidos. También podemos detectar un funcionamiento extraño o un poco lento al navegar. Como la apertura de publicidad en popups, etc …
Por ello, los navegadores web incluyen dentro de su Configuración opciones para restaurar los ajustes de fábrica y eliminar todo rastro de programas y pluggins instalados. De esta manera, no será necesario, reinstalar el software. Para restaurar los valores originales de Internet Explorer visita https://support.microsoft.com.
En Google Chrome se realiza de manera similar:
Prueba a vaciar la caché o a restablecer los ajustes a la configuración predeterminada original. Para ello tecleamos en la barra de direcciones chrome://settings/ Mostrar configuración avanzada… / Restablecer configuración.
Haz una copia de seguridad de tus datos, contraseñas y favoritos antes de eliminar o restablecer configuraciones.
También, existen aplicaciones de terceros como TuneUp Utilities que también limpian y realizan ajustes de los navegadores web.